martes, 29 de mayo de 2012

EL PARTO


El parto, ese final tan esperado a 9 meses de eterna espera, 40 semanas que parecen nunca terminar, la maluquera, la pesadez, los sueños locos y los eróticos, los consejos de la mamá, la suegra, la muchacha, las amigas, las revistas, google, el ginecólogo y por supuesto, el curso psicoprofiláctico. Los dolores de espalda, el sueño incontrolable, los pies hinchados, la acidez, la flatulencia y todos los demás síntomas que sufrimos las mujeres de,  lo que según nos dicen, es el acto más bello de la existencia, dar vida, traer al mundo a un hijo.  Y sin duda es bello y maravilloso, como concepto, la realidad sin embargo, es otra cosa.
Unos días antes de la fecha prevista para el nacimiento de mi primera y única hija, me asaltó el miedo a que se me rompiera la fuente en algún lugar público, o en los muebles de la sala, o en el carro, o en la cama,  pensaba en todas las películas que nos muestran a mujeres que inundan de agua pisos y baños.  Y vaya usted a saber a que huele eso y si se daña un colchón o, peor aun, los asientos del carro. Mi mejor amigo en esa época, Google, me dijo que sólo un pequeñísimo porcentaje de las mujeres rompen fuente de esa manera, que el líquido amniótico no son más de 600 ml.  Y que tiene un ligero olor a cloro, es lo que nuestras abuelas llamaban “parto seco”.  Con esa información quede tranquilísima.  hasta el momento en el que quede parada sobre un charco de agua rosada que, como en las películas, inundaba el piso del pasillo y  mi ropa. Quede paralizada del susto.
Haciéndome la calmada me metí a la ducha mientras mi esposo, que también fingía una calma perturbadora, llamaba al obstetra y repasaba mentalmente el camino más rápido a la clínica a la que llegamos cerca de media hora después.  Me entraron de inmediato a urgencias.
Quiero anotar que el último control prenatal lo había tenido esa misma mañana, y que, según el médico, la niña no nacería en los siguientes 8 a 12 días.  Siendo así, yo había programado mi cita para hacerme la cera para la semana siguiente. Ahora me encontraba  a las 11 y media de la noche, en el baño de un consultorio en urgencias poniéndome una diminuta bata azul  con las piernas peludas cual futbolista profesional. No se como estaría “allí” pues hace meses no me la veía. El día del parto lo recuerdo como el día que perdí por completo la dignidad. Con mi diminuta bata me acosté en una camilla mientras un médico residente, cansado y a media hora de terminar su turno, me hacía las preguntas pertinentes para la historia médica al tiempo que me realizaba un tacto, una enfermera me ponía una sonda y otra me pinchaba para sacar una muestra de sangre. Durante la siguiente hora me hicieron un lavado, una sonda, y dos tactos, me cambiaron de camilla y me subieron a la habitación donde esperaríamos el magno evento del alumbramiento.  Y es entonces cuando empezaron en serio los dolores y el tal trabajo de parto. 
Durante el trabajo de parto realmente nadie trabaja.  Y el tal “trabajo” consiste en soportar un dolor indescriptible que, nuevamente contrario a lo que enseñan las películas, no es en la panza; es en la panza, la espalda, la cadera, las piernas, los brazos, los hombros y hasta el pelo. Las enfermeras, los médicos y  el esposo no es mucho lo que pueden hacer, y, sinceramente, es mejor que no hagan nada. En mi caso, era mejor que ni se acercaran a la cama.  Una contracción cada dos minutos y cada una dura cuarenta y cinco segundos. Treinta contracciones y un centímetro de dilatación por hora y se necesitan diez centímetros para que el niño pueda nacer, es decir que mínimo son unas 300 contracciones antes de comenzar a pujar. Para  las 5 de la mañana, es decir,  luego de unas 180 contracciones, el parto natural comenzó a parecerme una idea demasiado romántica, media hora después estaba rogando por la epidural y a las seis de la mañana agarre a la enfermera por el cuello pidiéndole amenazante que, de ser necesario, me dinamitarán.
La anestesia epidural es una anestesia local que se pone directamente en la medula espinal.  Para aplicarla uno debe estar acostado de medio lado o sentado y encorvado hacia adelante para que un sádico que viene con una aguja sea capaz de meterla en el medio de dos vertebras en el minuto y medio que tiene uno para respirar entre contracción y contracción.  El procedimiento ha sido exitoso cuando uno siente un corrientazo que baja en menos de un segundo por las dos piernas dejándolo a uno paralizado de la cintura para abajo.  Es cuestión de un segundo en el que uno cree que se va a morir.   Las contracciones siguieron con la misma frecuencia pero ahora sin dolor, así que de nuevo volví a la idea romántica del parto natural, pedí perdón por los insultos, los gruñidos y las malas palabras, las muchas, muchas malas palabras. 
A las siente y media de la mañana apareció mi obstetra a quien habíamos llamado cerca de nueve horas antes y me había dicho que me fuera yendo para la clínica que él llegaba allá. Bañado, vestido y recién desayunado. Saludo cálidamente a mi esposo, hablaron de los últimos sucesos del mundial de fútbol que se llevaba a cabo en el momento, se puso un guante, me hizo un tacto, sacó la mano y calmadamente anunció que tendría que hacer una cesárea. Creo que si no hubiera estado paralizada de la cintura para abajo, despierta desde hacía mucho más de 24 horas, agotada, humillada y vestida con una diminuta bata azul, le hubiera saltado a la yugular al miserable ese que me había hecho pasar por todo esto para terminar abriéndome la panza y sacando a la niña. 
Camila nació a las 7:54 de la mañana del martes. No sirvieron los consejos del curso ese, ni de las abuelas, ni de las amigas, ni de Google, ni de las enfermeras, ni de nadie.  No me acorde de respirar, ni de relajarme, ni de concentrarme el la dilatación, ni de nada.  No sentí ninguna magia celestial cuando ví a mi hija por primera vez, ni se me olvidaron las casi 10 horas anteriores, ni dejaron estar a mi esposo presente, ni me dijeron que queda uno como si le hubiera pasado una aplanadora por encima.  Hoy en día creo que mi hija es lo mejor que ha pasado en mi vida, la amo más que a nada en el mundo  y prometo no volver a hacerlo.

DE VUELTA.

Luego de un embarazo de 39 semanas, 9 horas de trabajo de parto, lactancia, crianza, pañales, micas, mocos, juguitos, galleticas, sopitas, pediatras, profesores y niñeras, logro de nuevo volver por acá, ahí perdonarán la demora.

sábado, 26 de diciembre de 2009

Tu eres la tristeza de mis ojos
que lloran en silencio por tu amor
me miro en el espejo y veo en mi rostro
el tiempo que he sufrido por tu adios

Obligo a que te olvide el pensamiento
pues siempre estoy pensando en el ayer
prefiero estar dormida que despierta
de tanto que me duele que no estes

Como quisiera ahhh que tu vivieras
que tus ojitos jamas se hubieran
cerrado nunca y estar mirandolos

Amor eterno e inolvidable
tarde o temprano estare contigo
para seguir amandonos

Yo he sufrido tanto por tu ausencia
que desde ese dia hasta hoy no soy feliz
y aunque tengo tranquila mi conciencia
se que pude haber yo hecho mas por ti

Oscura soledad estoy viviendo
la misma soledad de tu sepulcro
tu eres el amor del cual yo tengo
el mas triste recuerdo de Acapulco

Como quisiera ahhh que tu vivieras
que tus ojitos jamas se hubieran
cerrado nunca y estar mirandolos
amor eterno e inolvidable
tarde o temprano estare contigo
para seguir amandonos

Amor eterno (amore eterno) eterno....

lunes, 21 de diciembre de 2009

SEMANA 8 DE EMBARAZO. LOS ANTOJOS

Bueno, ya hemos llegado a la semana 8. Se supone que si llegamos hasta este punto las posibilidades de una pérdida son cada vez menores. Este muchacho como que viene bien agarrado. Las nauseas no se han ido y la gente sigue diciendome animadamente que sólo me faltan 4 semanas de maluquera, sólo 4!!! El embrión esta semana ha dejado de llamarse embrión y pasa a ser feto, yo le sigo diciendo el camarón, el alien o "the thing", Anibal lo llama el bicho. o el gusanito. Supongo que en algún momento pasará a ser "el bebé", que cursileria.

Esta semana han llegado con fuerza los antojos, y vamos aclarando algo señoritas, los antojos no son como en las películas una cosa desesperante que a las tres de la mañana este pobre hombre tiene que salir empiyamado por toda la ciudad buscando un mango biche con sal y limón, eso es malcriadez y un tanto de malparidez. Si bien el pobre hombre tiene el 50% de la culpa de todo lo que nos está sucediendo, nadie se merece tener que salir a buscar algo tan absurdo en piyama a altas horas de la madrugada. No sé como serán los antojos de las demás embarazadas, pero a mi me ha dado por comer unas porquerías que antes me producían un asco indescriptible. Tengo por ejemplo unas ganas locas de comerme unas papas rellenas que vende una señora gorda que llega con un canasto tapado con un trapo que creo que jamás ha visto el agua y el jabón, a una obra de construcción cerca de mi casa, acompañadas de un minivasito de cocacola caliente y sin gas. Me muero por irme a un piqueteadero de la 1 de mayo a echar morcilla de la que no es negra sino grisesita. Hay un puesto de empanadas en la calle 67 con séptima, no he visto las empanadas, pero una de dos, o son baratísimas o son deliciosas porque el chuzo ese vive lleno de gente, me muero por probarlas. Cuando estoy sola pido sopa de menudencias a Calivea, me la como con arroz blanco todo en el mismo plato y cuando se acaba siempre pienso que he debido pedir dos. Quiero pincho de carne de dudosa procedencia de esos medio amarillos que venden los domingos en el Parque Nacional. Hormigas Culonas, paleta de agua de esas de neverita de icopor sin empaque y con tapa de acrilico, pizza de carrito de afuera de cualquier universidad de garage, arepa de huevo de mostrador de cigarreria, sanduche de vitrina que no llevan ninguna salsa y habría que comerse con medio litro de gaseosa, gaseosa, mazorca con plomo de carretera, perros calientes de carrito de esos que traen hasta huevito de codorniz, chorizo de palito de pincho con arepita insipida, zanahoria con queso crema con cebollitas, pan con mayonesa, jugo de guanabana.

Es tal la cantidad de porquerías que me quiero comer que es más el miedo a intoxicarme que a subirme ridiculamente de peso, cosa que el endocrinologo me tiene absolutamente prohibido. Se supone que no puedo subir más de 10 kilos en todo el embarazo, jajajajajajajajajjajajajajajajajjajaajjajaj.


lunes, 30 de noviembre de 2009

SEMANA 7 DE EMBARAZO. LA PRIMERA ECOGRAFIA.

Siempre jure que no iba a ser una de esas mujeres que sufren todo el embarazo, que se quejan, que se agitan, que vomitan, que se asquean, que no prenda ese cigarrillo, que no puedo ni oler a ese señor. Siempre pensé que eso era pura malcriadez, viejas inmaduras que no tienen un ápice de berraquera, niñas mimadas. En resumen para mi el embarazo era una cuestión de actitud.
Estaba equivocadísima.
Las nauseas matutinas no son ninguna cuestión de actitud, es una moridera que le provoca a uno echarse en posición fetal y simplemente lamentarse. Aun así, y, apelando a la actitud, me levanto. Me como algo y el cuerpo revive un poco, lo suficiente como para lograr salir de la casa rumbo al trabajo. Nunca fui tan improductiva en las mañanas. Como de ocho y media a diez y media me repongo del viaje en taxi, y a esa hora comienza un ataque de hambre que me desconcentra totalmente. Para las once de la mañana tengo todo el cerebro ocupado pensando que voy a almorzar. Al almuerzo llego pensando que tal vez no debería comer nada con esa maluquera, pero mágicamente, al terminar de comer todo mal desaparece. Podría decirse que en este estado uno sólo logra vivir de a medios días. Estoy chinche, consentida, llorona y algo voluntariosa.
Para este momento no le he encontrado lo "bello y maravilloso" al tema este de la reproducción. No me siento embarazada, la idea me parece aún muy abstracta, me siento enferma. Al resto de la gente parece que si les cayó la noticia, que ya como que se dieron cuenta de la dimensión de la cosa y están todos extasiados.
Luego llegó la primera ecografía.
La primera ecografía, y esto se lo deberían decir a uno desde el comienzo, no es como en las películas con un gel por encima de la panza, no señoritas, es lo que llaman "trans-vaginal". Yo gracias a dios me entere dos días antes porque sino hubiera llegado con mi papá a un procedimiento que no nos habría permitido mirarnos a los ojos nunca jamás. Fui con mi mamá y mi hermana pues Anibal esta de viaje. Cuando uno llega con la mamá y la hermana a una ecografía, en un sala llena de mujeres embarasadísimas y maridos emocionadísimos ,todo el mundo lo mira a uno con cara de mamá soltera, metida de patas que se tiró la vida.
No voy a entrar en detalles por el tipo de procedidmiento, pero si les puedo decir que se me vino el mundo encima. En realidad lo que uno ve en la primera ecografía no es mucho, es más, no ve uno un carajo. El médico comienza haciendo una cantidad de mediciones que uno no entiende. pra louego voltearse y decir dulcemente: "Tu bebé esta muy bien!". ¿Tu bebé? MI bebé? TENGO UN BEBÉ????? la noticia como que me cayó de pronto y luego para que no me quedaran dudas, pude escucharle el corazón. Es lejos lo más impresionante hasta el momento, el corazón es del tamaño de un grano de azucar, el "bebé" es tan grande como una lenteja y se mueve!!! Oirle el corazón es un ataque de realidad.
Las nauseas matutinas siguen, pero ahora cuando me despierto ademas de nauseas me ataca la realidad, me levanto mareada y en shock. A ratos como que se me olvida, cuando me acuerdo vuelvo a quedar muda. Es una realidad, voy a tener un bebé. Si dios existe no creo que haya pensado esto mu bien.

domingo, 29 de noviembre de 2009

SEMANA 6 DE EMBARAZO. EL ZIGOTO AHORA ES EMBRIÓN. LAS RECOMENDACIONES.

Las nauseas matutinas no se han ido, la gente insiste en darme ánimo diciendo que son sólo los tres primeros meses, osea que me quedan cerca de dos meses con esta sensación de desmayo constante, que ánimo!!! mi mamá decidió pubicar la noticia en su Facebook antes que yo y mis hermanas se dicen tias entre ellas. Para mi papa oficialmente pase de ser la niña de sus ojos al estuche de su amado nieto. Bogotá, Panamá y Buenos Aires están enterados de la noticia, así que comienzan a llegar recomendaciones de todos lados del mundo para un feliz embarazo.

De Ecuador mi tia me recomienda no tomar limonada, ni comer papaya, ni agua de yerbabuena. Mi prima Natalia insiste en que no debo usar la escoba, ni tender la cama. Mi papá no me deja montar a caballo ni en bicicleta ni tomar cocacola, mi mamá no quiere que camine mucho ni que suba las escaleras que llevan a mi casa, mi amiga de Alemania me dice que no puedo comer sushi ni carpacio y que si ha oido algo de la papaya que mejor no me la coma. Que no tome cafeína, que no tome muchos cítricos, que mejor si tome muchos cítricos, que no vaya el gimnasio (esta si la he seguido al pie de la letra), que no tire o mejor que si, que no me angustie, que me cuide, que no diga groserias, que no tenga malos pensamientos, que camine despacito, que no baile desaforadamente, que no me acerque cuando estan fumando, que hielito picado con limón. Que no le diga el camarón que el bebé me oye, que si ya pense en el nombre, que venga por unas cositas, que no vaya a comprar nada antes del 7 mes, que no le diga a nadie que guardemos el secreto. Que duerma mucho, que aproveche para trabajar, pero que trabaje poquito, que se tome un suplemento vitaminico, que no tome nada. Que se eche de esta crema que no se ponga cosas apretadas, que se prepare las tetas, que fresca que eso es facilísimo.

Por otro lado mis pobres gatos han tenido la peor semana de sus vidas. Todo el mundo parece estar contra ellos, los argumentos van desde que transmiten una enfermedad altamente mortal hasta el ataque feroz que sufrira el criaturo cuando llegue. En los ultimos dias fueron bañados, desparasitados, vacunados, tuvieron que hacer popo en un periodico para muestras coprologicas, fueron examinados, oscultados, revisados de arriba a abajo, de la cola a la trompa. Pobrecitos, todo para llegar a la conclusión de que están más sanos que yo. Que la toxoplasmosis no es mortal y sólo la transmiten una semana en su vida, que sólo les da si son cazadores y estos dos a duras penas persiguen una mosca.

Son tantas recomendaciones e indicaciones que sinceramente he decidido no hacerle caso a nadie. como lo que me antoja y hago todo lo que hacia antes, incluyendo no ir al gumnasio.

jueves, 19 de noviembre de 2009

PRUEBA: POSITIVA. 5 SEMANAS DE EMBARAZO: AHHHHH!!!!!!!!

Si señores, así como lo leen. Estoy embarazada, preñada, grávida, encinta, esperando, gestante y con la barriguita llena de huesos. Así que he decidido no sólo llevar paso a paso este magno evento a la red, sino que, más importante aún, voy a decir la verdad, no lo que le dicen a uno, sino la verdad!
En primer lugar he de decirles que no importa que tan buscado o no sea el crío, si es deseado, si usted esta casada o arrejuntada o fue un polvo pasajero y no se acuerda ni con quien, si lleva buscandolo un año o si metió las patas. La noticia no le caerá bien, es más, le caera como el mismisimo culo. Ver las dos rayitas en la prueba casera de drogueria provocará un llanto descontrolado que durará desde 15 hasta 45 minutos de lagrimas a chorros. ¿por qué? pues porque esta embarazada!!!! luego del ataque de pánico entrará en estado de duda, ¿si sera buena esa prueba? porque mirandolo bien la rayita no se ve del todo moradita o azulita. 24 horas y 3 pruebas despues usted seguirá embarazada. Comenzará de inmediato a sentir todos los sintomas conocidos del estado.
Por el momento no he podido desifrar si los sintomas aparecen y entonces uno se da cuenta que esta "preñao" o se da uno cuenta primero y entonces aparecen los sintomas.

PRIMEROS SINTOMAS
NAUSEAS
Lo que dice tu médico: puedes sentir unas ligeras nauseas durante la mañana.
La verdad: uno siente nauseas desde que abre los ojos hasta que termina de almorzar, unas nauseas que vienen a veces con sensacion de me voy a desmayar. Ni hablar de montarse en un taxi o bus con algun olor a gasolina o loción del chofer o ambientador barato. A eso de la hora del almuerzo se van ligeramente pero vuelven de manera violenta cuando al zigoto le da hambre. Las texturas babosas producen un asco indescriptible, osea que olvidese de batir huevos para el desayuno, es más, olvidese de los huevos.
El remedio: nada. ayudan un poco las llamadas galleticas de soda, pero sólo un poco no se haga ilusiones.
SENOS ALGO HINCHADOS Y SENSIBLES
Lo que dice tu médico: puedes sentir algo de hinchazón y sensibilidad en tus senos.
La verdad: TENGO TETAS!!!!!! es lo mejor que me ha podido pasar, he pasado de un 32A a un 34B, estan divinas, los escotes me quedan como nunca. Por primera vez en la vida me miran a las tetas y no a los ojos, ojala se queden así. Eso si no me las puedo ni mirar de lo que duelen.
El remedio: Blusitas nuevas, escotes mostrones, ropa interior sexy.
TENER DOLORES TIPO MENSTRUAL
Lo que dice tu médico: puedes tener algunas molestias en la zona pélvica.
La verdad: hay un dolorcito bajito los primeros días que uno no sabe si es un pedo atravezado o un cólico como cuando a uno le va a llegar. cuando el dolorcito comienza a pasarse se pasa pero para los lados e incluso atras, como si hubiera hecho ejercicio de cola tres hroas seguidas en el ginmasio.
El remedio: nada, de malas.
CAMBIOS DE HUMOR
Lo que dice tu médico: puedes tener algunos ligeros cambio de humor.
La verdad: una berraca lloradera que no la para uno con nada, desde la prueba de embarazo pasando por imagenes tristes del noticiero, el señor que da las gracias por la moneda, el niño que sonrie jugando con el perro. Basicamente es una cursileria insoportable.
El remedio: nada, llore mija que no hay de otra.

Bueno, pero no entremos en pánico, tambien hay cosas buenas. He descubierto hasta ahora dos grandes super poderes.
1. El Super Olfato: puedo saber que están cocinando en el piso de arriba, quien se baño con que jabón y que loción se echo el taxista. Las frutas se convirtieron en fuentes de olores increibles, es más, siento verdadero amor a las manzanas y las peras, ni hablar de las naranjas. Puedo seguirle la pista a un olor desde mi cuarto hasta la nevera donde un limón se pretrifica durante meses, el Fabuloso morado es mi nuevo mejor amigo.
2. Doña Alerta: tengo la percepción de un gato, se cuantos vienen caminando detras de mi y a cuantos metros, duro mucho mas tiempo cruzando una calle y ya me le baje a un taxista argumentando que si él queria matarse era su desición pero no la mía. Ahora, no se si estoy super alerta o altamente paranoica, eso lo averiguaremos.



martes, 5 de mayo de 2009

PARCERO TIENE PECUECA

El domingo fuimos en familia al mercado de las pulgas. Mi mamá, Karolyn, mi abuela, Anibal y yo. Mi abuela desde hace un año que murió mi abuelo anda pasando un mal momento, no se acostumbra a estar solita y esta muy sensible. La psicóloga le recetó un gato y ha sido imposible convencerla de que es la mascota perfecta. El domingo, como todos los domingos, en la esquina del mercado se acomodan todos los que tienen mascotas para la vender o para regalar, siempre hay perritos miniatura de todas las razas, pájaros y gatos. Me encanta pasar por esa esquina, es que los cachorros de cualquier animal siempre son tan lindos.... este domingo me encontré unos pug, de esos que es como que el abrigo les quedó grande, había unos labradores, unos chandas y otros finos, había afganos, french poodle que los odio, unas chandas sin raza y en toda la esquina una canasta con una niña rubia al lado con cara de tristeza con 4 gatos miniatura, todos peludos, todos con un moño rojo. Mi debilidad son los gatos chiquitos. Me acerque despacito, se me acerco la hermanita de la niña.
- Por favor llevate uno. Mi gata tuvo doce y mi mamá me va a matar, esta desesperada y me dijo que hoy los sacaba de la casa. Me dijo con lagrimas en los ojos.

Me conmovió el corazón. Así que decidí buscar a mi abuela para que con todo este cuadro conmovedor y los gatos tan bonitos se animara. Salí corriendo y la lleve de la mano a la esquina, efectivamente cayó desmayada con ese cuadro tan conmovedor, las niñas, los gatos, la canasta, los moños, era irresistible. Le pasamos uno de los gatos, divino, el único macho que quedaba, se enterneció la señora, lo mimó, lo abrazó y tan pronto le dije que se lo llevara se lo devolvió a la niña y dijo que gato ni loca. El plan no estaba funcionando, así que fui por apoyo, esta vez llegue con mi mamá, Karolyn, Anibal y la abuela de vuelta, ahora la niña chiquita lloraba porque se llevaban a uno, -que se llame Pelusa. Pedía. Para este momento yo ya tenía una gata en la mano que no me atrevía a soltar, mi mamá lloraba y consolaba la niña chiquita y la más grande se despedia deseandole una linda vida. Yo pensaba que llevándonos la gata, como ibamos a pasar toda la tarde juntos, pues mi abuela se iba a encariñar y cuando la dejaramos en su casa la dejabamos con todo y gata. Así que nos llevamos la gata. Ya saliendo de la esquina aparece la mamá de las niñas.
- no me has pagado
-queé???
-son treinta mil pesos.
No tuve más remedio que sacar los pinches treinta mil pesos del bolsillo muerta de la piedra, hasta ese momento todo daba a entender que los gatos eran regalados! Debo admitir que era una gran estrategia de mercadeo este tema de la niña monita sentada con el gatico con un moño rojo y la lágrima en el ojo y la hermanita diciendo que su mamá los iba a tirar. Vieja condenada hice cuentas y se echo trescientos sesenta mil pesos en una mañana, trescientos sesenta mil!!!!!!

Metí la gata en la mochila y nos fuimos a almorzar, durante todo el almuerzo mi abuela enloquecida, nos contó de una gata que tuvo uno de sus hijos y se llamaba Pecueca, y otra que ella amaba y mi abuelo sin querer la había matado de un tiro y una perrita y la compañía que son y lo bien que sería volver a tener un perrito y que un perrito para que abuela mejor un gato y así la gata fue el tema del conversación todo el almuerzo. Creíamos que el plan era perfecto. Pero no.

Ahora tengo una nueva gata en la casa, se llama Pecueca.

Me costó los treinta mil que me cobraron de sorpresa, más un antipulgas porque estaba llena de pulgas, más la comida de gato bebé que es mas cara, más el plato, más el desparasitante, más las galletas que compre para suavizarle la noticia a mi gato, mi gato único, el gato que se echo a perder de lo mimado, el gato que cree que el apartamento es de él y que nosotros le arrendamos un cuarto, el gato castrado que tengo en la casa y traje desde Buenos Aires porque el veterinario me dijo que estaba tan consentido que si lo dejaba se moría. Parcero.

Llegamos a la casa con la gata en miniatura, como siempre Parcero, que cree que es perro, nos espera en la puerta con cara de alegría. Cara que desapareció tan pronto descubrió que el bulto que llevábamos era un animal. No se como explicarles pero la expresión que tenía el gato era como si estuviera pensando:
-¿qué es esto, una broma pesada? primero me quitan las bolas y ahora me traen una hembra????

Gruñó, sopló fuerte por la nariz, se ofendió y salió corriendo a su caja. Llevamos tres dias que no me quiere ni ver, no lo puedo ni tocar. La situación está complicada.

Parcero odia a Pecueca. Pecueca quiere ser amiga de Parcero. Parcero detesta tener que compartir el baño. Pecueca quiere jugar con Parcero cuando Parcero esta cagando. Parcero se le come la comida a Pecueca. Pecueca juega con el juguete sagrado de Parcero. Parcero perdió su puesto fijo en el sofá. Pecueca sólo toma agua del plato Parcero. Parcero le tira manotazos a Pecueca. Pecueca es del tamaño de la mano de Parcero. Parcero esta pasando el peor momento de su vida. Pecueca esta engordando porque ya tiene 11 hermanos. Parcero esta gordo por comer comida de bebé. Pecueca va a perder un diente tratando de morder las pepas de la comida de Parcero. Parcero no puede creer que yo le haya llevado una hermana menor. Pecueca no puede creer la dicha de tener un hermano mayor.

lunes, 27 de abril de 2009

EL PLAN PERFECTO. CASO No. 1

Llega a la fundación una camioneta súper estrambótica escoltada por un automóvil de alta gama, parquean, se bajan de automóvil dos hombres jóvenes, uno un poco mayor que el otro, ambos un poco parecidos entre ellos. De la camioneta se baja el chofer que alista una silla de ruedas y una enfermera impecablemente vestida. Con mucho cuidado bajan a una pobre viejecita que sientan en la silla con dificultad, le limpian las babitas, le acomodan la ropita y entran al consultorio. El doctor los recibe, es la primera consulta. Al parecer la viejecita tuvo una caída y, si bien no le pasó gran cosa, desde entonces perdió el habla y la movilidad, tienen que ayudarla para todo, incluso les cuesta mucho que reciba la comida. Que raro, piensa el doctor, no parece tener daño alguno. Los hijos le cuentan que además están muy preocupados pues ella siempre ha estado al frente del negocio familiar, fue muy activa y los sacó solita adelante, es muy raro todo lo que esta pasando, los demás médicos no encuentran nada enfermo, nada dañado, ni atrofiado, creen que necesita un psicólogo. El doctor les pide quedarse a solas con la señora.

Tan pronto los hijos salen del consultorio y la señora se ve a solas con el psicólogo se para de la silla, el doctor cae sentado. La vieja se estira, se acomoda y vuelve a sentarse.

- Doctor, acaba de ser escogido para ayudarme porque tengo un plan.
Él no salía de su asombro
- Sumerce no solo me va a ayudar, sino que no puede decir nada por confidencialidad de paciente-médico. He decidido que tengo que retirarme, estoy cansada de mantener a ese par de vagos de mis hijos y de ver como malgastan mi trabajo. Es por eso que mi plan consiste en volverme un vegetal y ver en vida lo que pasara el día de mi muerte, he decidido que voy a ver que hacen este par de vagos para ver a quien le dejo todo.

El doctor se fue de culo, es el plan perfecto! la vieja es un genio! pero, que iban a hacer? ella ya lo tenia todo resuelto, le dijo que dijera que era necesario ir todos los días a terapia, que no dejaran la enfermera, que el la trataría. Ella mientras tanto hacia de voluntaria con los chicos y los animales. Salió el doctor del consultorio, le dijo a los hijos que sería necesario verla a diario, que no era necesario que la enfermera se quedara con ella, que para eso estaban las terapeutas, que sería un proceso muy lento, pero que había esperanzas, que mientras tanto vieran la forma de ponerse al frente del negocio.

Empezó la viejita a ir todos los días. Llegaban el chofer con la enfermera, bajaban la silla, la acomodaban, le limpiaban la babita y la dejaban en manos de las terapeutas. Una vez su flamante camioneta se iba la vieja salta de la silla, ayudaba con los niños, leía, jugaba con los perros. La vieja estaba de vacaciones. Pasaditas las cinco de la tarde la vieja se sentaba en su silla y veía llegar s camioneta con el chofer y la enfermera, a esa hora volvía a quedar inmóvil. Pasaban los días y la viejita estaba radiante, los hijos llamaban a la fundación a contarles que estaba recibiendo mas comidita, que se veía con la expresión mas iluminada, que si bien seguía sin mover un dedo, se le veía mas vida. Y era así, con las idas al campo la viejita se sentía aún más activa que trabajando en su negocio, aprendió a montar a caballo, charlaba durante horas con él doctor con quien terminó siendo gran amiga.

Un mes o mes y medio el doctor le preguntó a la señora como iba su misión de ver a sus hijos tomar el control, sobretodo porque ya todo el mundo estaba esperando algún tipo de mejoría en la pobre viejita. Ella ya tenía claro cual de sus hijos sería el heredero de su negocio, el hijo que ella no hubiese jamás imaginado. le contó que un fin de semana, como todos pensaban que la viejita no oía, habían casi que repartido la herencia en su presencia, que sus nueras se peleaban por la casa, que su hijo menor, uno que el médico no conocía era el único que trabaja de sol a sol mientras los otros dos sacaban provecho de la empresa. Vio como la nuera que más quería sacaba sus cosas y se las ponía. Vio su muerte en vida. Decidieron entonces que no podía mejorar de un momento a otro porque sería sospechoso, empezaría con decir algunas palabritas para recuperar el habla primero y la movilidad poco a poco.

Esa noche los hijos y las nueras celebraron que la viejecita pudo hacerse entender, dejaron de gritarle como si estuviera sorda y recuperaron cada cual su personaje de niño bueno. A las pocas semanas la viejita hablaba y poco a poco recuperaba sus movimientos, pudo ir al baño sola y comer y eventualmente logró ponerse de pie. Un mes y medio después la viejecita estaba como nueva. Se despidió con tristeza del doctor, el también triste le dio un abrazo y la dejó ir para su casa en su elegante camioneta ya sin la enfermera, sólo con el chofer. La viejecita llegó a su casa, reunió a sus hijos y les dijo que estaba en camino un abogado, iba a hacer su testamento en presencia de todos. Los hijos con las nueras vieron que llegaba el momento de redimir los puntos, sin saber, por supuesto, que todo había cambiado.

lunes, 20 de abril de 2009

VIDA DE CAMPO

Fortuna es una vaca que llego a la fundacion como de casualidad, como no habia mas vacas, y jamas habiamos tenido una vaca pues se metio en el mismo potrero que los caballos. Los caballos son 4, todos machos en un principio, todos castrados menos Merlin, el tuerto, que es entero pero se comporta docil y mancito como si no fuera entero, ni siquiera con Carmelita, la mula, se comporta como un macho, reconocio desde un comienzo que Bernie, el caballo blanco y mas viejo, es el lider, el macho alfa. Fortuna era muy ternerita cuando llego al potrero de los caballos, una novilla, asi que se adapto perfecto, hasta que empezaron a notar que estaba enfermita, algo le pasaba, debilucha, no subia de peso. Come bien, el pasto es bueno, no esta solita, que pasara? se pregunto mi papa. Luego de unos dias llegaron al meollo del asunto, cuando Fortuna se echaba, como todas las vacas, a rumiar, Apolo, uno de los caballos corria inmediatamente a pararla, la pobre no duraba echada ni dos minutos, y el caballo en su buena fe intentaba que corriera un poco. Los caballos nunca se echan a menos que esten enfermos, el caballo se creia un heroe que salvaba a la yegua gorda y pintada de un colico mortal cada rato. Toco entonces separar a Apolo de la vaca, asi que la vaca comenzo a crecer y a engordar. Llego entonces el tiempo de toda vaca que entra en calor, y como la vaca ya a esta altura se habia olvidado de que es vaca, cayo perdidamente enamorada de Bernie, el caballo blanco. Ella no hayaba que hacer, le picaba el ojote, le mujia seductora, le pasaba el rabo por la nariz. El pobre Bernie estaba desesperado, no sabia como sacarse de encima la vaca confundida, porque el si sabe que ella es una vaca, tiene mucha experiencia y muchos anos. Asi que finalmente se decicio darle a la vaca su propio potrero antes de que sufriera por el desamor del caballo.

Carmelita es la mula, ella vive con los caballos, tiene su pesebrera y su piyama como todos. Su labor es cargar el agua, el heno, los palos para las cercas y de vez en cuando halar el sulki o carreta en la que mi papa va al pueblo (si, mi papa va al pueblo en un sulki, pero eso es otro tema), podriamos decir que Carmelita es "la de servicios generales". Como nunca hubo yeguas y la unica hembra era una vaca, Carmelita se sentia afortunada de vivir entre tanto caballo grande, de salto, sin nada de discriminacion por su condicion de mula. Hacia su trabajo como ninguna, caminaba orgullosa cargando el agua para sus chicos, llevandoles el heno del que ella tambien comia. Pero un dia, hace poco, llegaron dos yeguas a la fundacion. Carmelita tuvo que ceder su pesebrera y hasta su piyama, ahora duerme afuera como una mula cualquiera. Llevan dos semanas en que no hay poder humano que la haga llevar el agua, ni siquiera el heno, ni decir de las cercas, todas sin terminar. Carmelita esta ofendida, se dio cuenta de que no es yegua, tiene envidia de las yeguas y ademas como no esta haciendo ejercicio esta gorda, dos complejos en uno, mula y gorda. Decidieron meterla al potrero con Fortuna, ahi se acompanan, me imagino que hablaran de su desamor con los caballos y la envida a las nuevas yeguas.

Lalo y Lola son dos loros, asi les pusieron cuando llegaron, pero de repente un dia ellos mismos se cambiaron el nombre y ahora se dicen Roberto y Rebeca. Alguien en su vida pasada, antes de la fundacion, les corto las alas, asi que se la pasan sentados en un palo de una cerca a la entrada, son "el comite de bienvenida". Roberto y Rebeca no sabemos si son machos o hembras o si es un macho y una hembra, pero es como tener a Tola y Maruja en la fundacion. No pueden ver que pase alguien cargado porque lo encienden a grito: Hagaleee!!! perezoso!!! que paso? se la pudooo!!????? Si llueve son las que avisan: Bueno, bueno se vino el aguaaaa!!!! corran, corran que nos mojamosssss!!!!! y solitas se tiran de la cerca y corren hacia la casa. A Carmelita la animan como animaban a la mula Carmelita que tenia Simon Bolivar y que era la que cargaba el canon, Hagale JUiiiii Carmelitaaa!!!! eso claro, cuando Carmelita estaba dispuesta a trabajar yno estaba ofendida.

Las dos gatas, Fioreta y Anastasia tienen medio personalidad de perro y el territorio definido, Fioreta, la mas vieja, se encarga de las pesebreras, Anastasia vive en la casa porque cuando sale, Teo, el perro recogido que se cree labrador, la persigue y la hace subir al techo de la casa de donde toca bajarla con escalera. Con los loros no se meten, su labor es evitar que lleguen ratones. Los perros son dos, Valentina que es una golden vieja y muy muy gorda, camina como las negras gordas culonas de la costa pacifica y tiene ese tipo de personalidad. Teo es el recogido, el cree que es un labrador negro finisimo y mira mal a los gosques. Es el mas educado, como que no puede creer que le sirvan comida dos veces al dia y agradece clada plato, es la sombra de mi papa y ya aprendio a trabajar con los ninos, porque se me olvidaba comentarles que la fundacion trata ninos y adultos con terapaias con animales, es solo que los animales tambien a veces necesitan su terapia.